El operador del sistema gasista español, Enagás, anunció el martes que su beneficio neto del primer trimestre aumentó aproximadamente un 20%, impulsado por los ingresos procedentes de la terminal de gas natural licuado (GNL) de El Musel y unos gastos estables.

A pesar de que la demanda de gas en el país ha disminuido durante dos años consecutivos y ante los ambiciosos planes de España para el hidrógeno verde, la compañía, en la que el Estado español posee un 5% de participación, está buscando hacer la transición de su papel tradicional como operador de la red de gas natural a gestionar una red de infraestructura de hidrógeno.

El beneficio neto para el período fue de 65,3 millones de euros (69,56 millones de dólares) en comparación con los 54,6 millones de euros del año anterior.

El año pasado, la empresa energética Endesa ganó un contrato de tres años para los servicios logísticos de la planta de El Musel —específicamente la descarga, almacenamiento y recarga— después de que la planta estuviera inactiva desde su finalización.

La compañía afirmó que está en camino de alcanzar su objetivo de beneficio de entre 260 millones de euros y 270 millones de euros para el año.

($1 = 0,9387 euros)